Playas vírgenes de Huatulco, un tesoro natural
El Patrimonio Natural de las costas oaxaqueñas es muy rico y extenso. ¡Atrévete a conocerlo!
En Bahías de Huatulco hay 36 playas, de las cuales solo diez son las más conocidas entre los visitantes; el resto, son paraísos naturales poco concurridos que alberga playas vírgenes, resguardando en su entorno un tesoro natural que cautiva por su belleza e importancia en la biodiversidad de Oaxaca.
El Patrimonio Natural en la Costa oaxaqueña es muy rico y valioso, definitivamente sería muy extenso el espacio que se necesita para describir de forma detallada las diversas playas que existen dentro del concepto virgen, es decir, que no han sufrido ninguna modificación. Por ello, a continuación se detallarán algunas de las playas vírgenes del municipio de Santa María Huatulco.
Del lado del Faro, en la parte baja, se ubica la playa Violín, a la cual hay que acceder con mucho cuidado si se hace por tierra, preguntando a los nativos la forma más segura para llegar a esta hermosísima playa que se caracteriza por su tranquilidad, limpieza absoluta y oleaje suave.
Una de las agencias municipales de Santa María Huatulco es Bajos de Coyula, donde se localizan las playas Boca Vieja y Cuatunalco, además de la Boca Barra frente a la playa Boca Vieja y la Laguna Ixtapa. Aquí, los residentes siguen practicando la pesca tradicional para proteger el entorno; también se ubican algunos restaurantes para la atención de los turistas, en donde ofrecen los productos de la pesca del día.
Es una verdadera delicia para el paladar los guisados que se obtienen por la frescura de los productos del mar y la cocción con leña, además de las recetas caseras que le dan un toque muy original a todos los platillos.
Para descansar placenteramente, un gazebo hecho de horcones y palma es suficiente para sentarse a obervar la inmensidad del imponente océano Pacífico. Este escenario es el marco perfecto para contraer matrimonio, teniendo como fondo una bella puesta de sol.
Es irónico, pero comprensible, que hoteles de gran turismo monten un gazebo a la orilla de la playa para que se realice una boda, así que este escenario en una playa virgen cumple el mismo acometido y causa la misma emoción y alegría a los contrayentes y sus invitados, pues el escenario natural es la vista al mar, ya que el romanticismo los proporcionan el sol, el mar, la vista panorámica y el amor, además de la compañía de sus seres queridos.
Cada playa, laguna, cascada, ríos y montañas inspiran a describir su belleza incomparable, pero es necesario asistir para comprobar que las experiencias que se viven en cada rincón de Oaxaca son inolvidables.
En este concepto de playas vírgenes también destacan la playa Tejón, cerca de Tangolunda y la playa Coyote, en la Bahía de San Agustín, en las cuales es preferible asistir en grupo o en familia para que puedan disfrutar varios días de excursión y tengan la oportunidad de conocer las maravillas naturales de la costa oaxaqueña.